Actualidad eafitense
Los impactos de la pandemia también se evidencian en los
resultados de las pruebas diagnósticas de los estudiantes
Este es parte del escenario que la Universidad revisó y priorizó para tomar la decisión institucional del regreso a la presencialidad, desde enero de 2022.
• Con el documento Efectos de la pandemia en el desarrollo de los estudiantes, la Vicerrectoría de Aprendizaje hace una revisión por diferentes estudios en Colombia y otros países sobre las consecuencias de esta contingencia en el aprendizaje y la salud mental de las comunidades académicas.
• La tercera entrega de este especial evidencia como los resultados y hallazgos de esta revisión coinciden con las evaluaciones diagnósticas que EAFIT realiza a sus estudiantes de primer semestre, de transferencia y del nivelatorio de música, y que muestran falencias en los componentes de lectura y escritura.
A más de dos años de la pandemia por covid-19 sus efectos siguen latentes en muchas esferas de nuestra sociedad. Ya lo vimos en el que tiene ver con el aprendizaje (ver artículo La presencialidad es clave para mitigar los efectos de la pandemia en el aprendizaje), y también en la salud mental (ver artículo Ansiedad y estrés, algunos impactos que nos dejó el confinamiento y la alternancia).
Sin embargo, en la tercera entrega de este especial sobre el documento Efectos de la pandemia en el desarrollo de los estudiantes, también vale la pena cuestionarse sobre cómo esos impactos se han materializado en las vidas y procesos de los nuevos estudiantes y, de esta manera, entender la importancia del regreso a la presencialidad.
El insumo para hacer este análisis son las evaluaciones diagnósticas que se les realizan a los estudiantes que comienzan su proceso de formación en la Universidad, y cuyos resultados, después de la pandemia, ya muestran algunos retrocesos y puntos a tener en cuenta.
Nos hemos encontrado, por ejemplo, que en una de las áreas que se evalúan, las de lectura y escritura, el nivel de algunos alumnos corresponde más o menos al de una persona de séptimo grado.
“Así mismo, cuando estos eafitenses llegan a la Institución ellos quedan clasificados en tres niveles y durante los últimos tres semestres no hemos podido abrir el máximo nivel, que es el de edición textual, porque entre un promedio de mil estudiantes solo están pasado uno o dos. Este es, sin duda, uno de los impactos más grandes de la pandemia”, explica Patricia Toro Pérez, jefa del Centro EXA para la Excelencia en el Aprendizaje, una de las áreas que participó en la elaboración del documento, junto a la Vicerrectoría de Aprendizaje y la Dirección de Desarrollo Académico.
Se trata de un indicador que, como agrega la administrativa, coincide, por un lado, con el informe del Ministerio de Educación Nacional que señala que, durante los últimos dos años, se ha reportado una disminución de dos puntos porcentuales en los resultados de las pruebas Saber 11.
Igualmente, con los reportes del Banco Interamericano de Desarrollo que definen el concepto de pobreza en el aprendizaje cuando no se alcance el nivel de conocimientos que una persona de 10 años en adelante debería tener para su edad.
“Llegar a la U con esas deficiencias puede incidir en que esta brecha siga aumentando e incluso, en que nunca se cierre, porque si bien los estudiantes desarrollar habilidades, no llegan al nivel esperando para la vida universitaria. Por eso uno de los primeros compromisos de EAFIT fue con la presencialidad y, de manera posterior con otras acciones que ha venido fortaleciendo”, puntualiza Patricia.
Las acciones que tiene la Universidad para mitigar estos impactos
Las pruebas diagnósticas, que antes se realizaban de manera voluntaria, desde este segundo semestre de 2022 serán obligatorias para los estudiantes nuevos, de transferencia externa o del nivelatorio en música. Esta es una de las acciones con las que la Universidad hace un seguimiento permanente a sus estudiantes, especialmente en lo que tiene que ver con lectura y escritura, matemáticas e inglés.
Dependiendo del nivel con el que ingrese, a través del Núcleo de Formación Institucional son asignados a un grupo donde podrán ser nivelados. Y, en el caso de aquellas personas que obtienen una calificación menor a tres en matemáticas, la Universidad los inscribe automáticamente en talleres en este campo, independiente del programa en el que estén matriculadas.
Desde el Departamento de Desarrollo Estudiantil también se promueven actividades prácticas de nivelación y, de manera complementaria, se cuenta con el apoyo del Consultorio Matemático y del Centro de Estudios en Escritura y Lectura (Celee).
En lo referente a los resultados de las pruebas diagnósticas en inglés, Idiomas EAFIT se encarga de contactar a los estudiantes para que puedan fortalecer sus conocimientos en una segunda lengua. En la actualidad este es uno de los ítems con mejor resultados institucionales en las Pruebas Saber Pro.
“A los programas académicos también se les entregan los resultados de las evaluaciones para que puedan conocer cómo llegan sus estudiantes y realizar los ajustes curriculares necesarios”, menciona Patricia Toro.
Además de las acciones enfocadas en estudiantes, desde este año se lanzó un curso dirigido a profesores en el que estos se pueden inscribir para ayudar a sus estudiantes a incrementar o aprender habilidades en lectura y escritura, así como para compartir experiencias y aprendizajes con sus colegas.
“Todo esto evidencia que es en la presencialidad donde debíamos encontrarnos para enfrentar esas dificultades, un espacio común que nos ofrece muchas más oportunidades que la virtualidad”, concluye la jefa de EXA.