El modelo de competencias de la Universidad permite identificar y desarrollar las conductas requeridas por las personas que laboran en esta para alcanzar los propósitos institucionales y el plan estratégico, a la luz de la misión y la visión.
En 2012 se inició la revisión del modelo de competencias, teniendo como referente el Plan Estratégico de Desarrollo 2012-2018 y, en 2013, se llevó a cabo un proceso de construcción colectiva que contó con la participación de profesores, empleados administrativos y de dirección académica, que permitió definir el nuevo modelo de competencias de la Universidad, gracias a la experiencia en los roles en los que se desempeñan, al igual que el amplio conocimiento de la Universidad.
Como resultado de lo anterior, se definieron las siguientes competencias institucionales, que son aquellas que deben poseer todos los empleados de la Universidad:
Innovación
Logro responsable
Excelencia en el servicio
De igual manera, en atención a los roles o cargos específicos se definieron como competencias funcionales: comunicación, visión estratégica, liderazgo, gestión administrativa, gestión de la interculturalidad, y orientación a la seguridad y el cuidado.