Actualidad eafitense
Guía práctica para contrarrestar las
fake news
La Biblioteca cuenta con un Programa de Formación en Competencias Informacionales para ayudar a desarrollar estas. En la imagen uno de los cursos virtuales.
• En estos tiempos en los que nos comunicamos a través de redes sociales o aplicaciones de mensajería es importante aprender a detectar las noticias falsas de la información verdadera. Es parte de nuestra responsabilidad con el uso ético de estas herramientas.
• El Centro Cultural Biblioteca Luis Echavarría Villegas, apoyado por docentes de la U y bibliotecólogos del país, nos comparte una lista de recomendaciones a la hora de verificar, contrastar y confirmar la información que recibimos.
Ver guía.
La última rotación del Pico y Placa, la más reciente medida de la Presidencia, el puesto de vacunación más cercano, o una falla en el sistema Metro, entre muchas otras, son algunas de las noticias que, seguramente, hemos enviando a través de cadenas o audios de Whatsapp, post de Facebook o videos de Instagram.
Y es que cuando se trata de enterarse de las últimas noticias, las redes sociales y las aplicaciones de mensajería se han convertido en una opción con mucha aceptación para comunicar y compartir información.
Sin embargo, también es importante reconocer que, como usuarios de estas herramientas, tenemos la responsabilidad de validar, contrastar y confirmar la veracidad de la información que compartimos porque si bien el contexto actual permite una mayor autonomía por parte de las personas al hacer uso de las tecnologías de la información y la comunicación, estas también se han visto impactadas por la circulación de noticias que, sin estar basadas en hechos reales, se presentan como si lo fueran.
Fake news es el término como se les conoce a este tipo de publicaciones. Y desde el Centro Cultural Biblioteca Luis Echavarría Villegas, el Programa de Formación en Competencias Informacionales ideó una estrategia de diez puntos para acompañar a los eafitenses en la identificación de este tipo de noticias que pueden generar desinformación, causar polémica o incluso ser ofensivas.
Se trata de un derrotero para el que contaron con la asesoría de bibliotecólogos de otras universidades del país, así como de las docentes María Alejandra Gonzalez-Perez, del Departamento de Organización y Gerencia; y Sonia López Franco, del Departamento de Humanidades.
Luis Felipe Atehortúa Betancur, auxiliar del Programa de Formación en Competencias Informacionales, y quien participó en su creación, nos acompaña a través de esta guía. El primer paso que sugiere el eafitense es no quedarse con el titular, sino leer la noticia completa y, una vez se haya cumplido con esta parte, pasar a responderse las siguientes preguntas:
¿La noticia es verídica?
Antes de compartir cualquier tipo de información es importante validar si esta es verídica o no. Una búsqueda en Google nos permitirá corroborar si otros medios están hablando del tema y así hacernos una idea de su veracidad.
¿La publicación es realizada por alguna agencia de noticias reconocida?
A veces nos pasa que, al consumir un mismo medio o plataforma, podemos tener una visión sesgada debido a la línea editorial de este. La recomendación es a contrastar con otras agencias como Efe, Bloomberg, Associated Press, BBC o Reuters, entre otras, que den respaldo a la noticia que tenemos. Nuevamente internet se convierte en un aliado para esta búsqueda.
¿Conoces al autor?
Si bien internet nos ha dado la posibilidad de publicar y compartir nuestro propio contenido a través de wikis, blogs o redes sociales, conocer la procedencia del autor es fundamental. Indaguemos un poco más sobre este o busquemos otras de sus publicaciones. Eso nos da la confianza de que es alguien que sabe del tema.
¿Los datos son reales?
Las noticias que incluyen datos no solo deben tener la fuente de donde estos provienen, sino que estos, a su vez, deben ser verificables. Está bien que sospechemos y validemos. Hay que sacar nuestro Sherlock Holmes interior.
¿La noticia es actual?
Muchas veces se toman algunas noticias o declaraciones de otros años y se publican como si fueran actuales, lo que genera desinformación, zozobra o falsas expectativas. Siempre se debe verificar la fecha de publicación.
¿Es una cadena sin un autor identificable o sin un enlace para ampliar la información?
A muchos de nosotros nos ha llegado, al menos una vez, alguna cadena de Whatsapp o Telegram sobre determinada información. Frente a esto hagámonos siempre preguntas como ¿quién está diciendo esto?, ¿me lo mandó alguien conocido?, ¿dónde puedo ampliar la información?
¿La persona que te envió la información es una fuente confiable y sabe de dónde viene la información?
En el caso de que efectivamente la persona que nos envió la información sea alguien de confianza, corroboremos directamente con esta y preguntémosle sobre la procedencia del mensaje. Google también puede ayudarnos.
¿Es una imagen?
Si la información es solo una fotografía o infográfico debemos tener en cuenta que, en la actualidad, existen muchas herramientas para intervenir este tipo de publicaciones. Pero, de igual manera, otra serie de oportunidades para verificar su veracidad, como los buscadores de imágenes para saber si están vinculadas a alguna noticia actual.
¿Es un audio o video?
Pasa lo mismo que con las imágenes, lo único que cambia es el formato. Pongamos en nuestro buscador un par de palabras claves que obtengamos del mensaje y verifiquemos.
Más sobre el Programa de Formación en Competencias Informacionales
Claudia Vélez Pereira, en la coordinación; Luis Fernando Ramírez Quintero, en la parte de logística; y Luis Felipe Atehortúa Betancur, en el diseño y actualización de cursos, hacen parte de este programa, que tiene como objetivo acompañar a los eafitenses para que hagan un uso responsable y ético de la información.
¿Cómo? A través de cursos sobre gestores bibliográficos, normas APA, búsquedas en bases de datos o en la web, recursos de la Biblioteca y la Sala de Patrimonio Documental, y máximo rendimiento de herramientas digitales, entre otros.
Estos cursos, gratuitos y dirigidos a estudiantes, docentes y administrativos, se ofrecen de manera presencial y virtual, y cuentan con varios niveles entre básico y avanzado. Para más información podemos visitar este
enlace.