Los mundos posibles de
La Vorágine confluyen en EAFIT, a través de esta exposición de gran formato
La muestra curatorial contó con la museografía de los profesores Efrén Giraldo Quintero y Mauricio Vásquez Arias, de la Escuela de Artes y Humanidades; Adelaida Acosta Posada, de la Escuela de Derecho; y del curador Víctor Muñoz.
• En 2024
La Vorágine, de José Eustasio Rivera, cumple 100 años de ser publicada y, sus reflexiones profundas sobre los límites de la condición humana y relaciones con la naturaleza y el medio ambiente continúan vigentes. Ese será el tema principal de la exposición
Vorágines, mundo(s) por venir, que se inaugura este jueves 24 de octubre, a las 5:00 p.m., en el Centro de Artes de EAFIT.
• En esta muestra de gran formato, 40 artistas presentarán su interpretación de esta novela desde diferentes ángulos y aproximaciones, acompañados por otra serie de piezas comisionadas y de colecciones privadas para permitir un diálogo entre piezas escultóricas y bibliográficas, fotografía, dibujo, video, pintura e instalaciones, entre otros elementos.
Un siglo ha pasado desde que fue editada y publicada. Y, desde entonces, La Vorágine, de José Eustasio Rivera, se ha convertido en una de las novelas fundacionales de la literatura colombiana y en un clásico latinoamericano gracias a que, a través de la travesía de sus personajes por la selva colombiana, retrata diversas problemáticas como la desigualdad, la explotación de los recursos, la naturaleza, la colonización, la identidad nacional y cultural, la resistencia y la lucha por la dignidad.
Ningún académico, a la fecha, ha podido clasificarla todavía como un relato romántico, una novela de aventuras o un texto de denuncia. Lo que sí se sabe es que, aunque fue escrita en los años 20, los desafíos que plantea siguen haciendo parte de la realidad actual. Y por eso, para conmemorar el centenario de esta novela y volver a poner sus ejes centrales sobre la mesa, a partir del 24 de octubre, el Centro de Artes de EAFIT (Bloque 32, primer piso), se transformará en una enorme selva en la que naturaleza, literatura y arte contemporáneo confluirán para propiciar reflexiones y conversaciones alrededor de estos temas.
Vorágines, mundo(s) por venir es el nombre de esta exposición de gran formato en la que 40 artistas presentarán su interpretación de esta novela desde diferentes ángulos y aproximaciones, acompañados por otra serie de piezas comisionadas y obras de colección. “Se trata, si se quiere, de un gran proyecto expositivo que es una conversación más abierta sobre
La Vorágine, y en el que las obras son las que proponen ideas y reflexiones en torno a temas, por ejemplo, como la crisis planetaria, la naturaleza o los fenómenos derivados del extractivismo”, explica Víctor Muñoz, curador general de la exposición.
Entre las piezas los visitantes podrán encontrar obras encargadas específicamente para la muestra; creaciones de otros artistas que, si bien fueron realizadas en momentos anteriores, sus temáticas y procesos se articulan con la exposición; y otro grupo de piezas de colecciones privadas que complementan la muestra expositiva.
“Cuando convocamos a artistas a realizar la obra comisionada, los invitamos a una conversación donde les contamos qué íbamos a hacer, les abrimos este proyecto y les hicimos un llamado a que pensaran, desde su obra y su lenguaje, cómo podrían acercarse al proyecto expositivo. De alguna manera, cada una de estas piezas termina respondiendo a la invitación, pero también son obras que, en el futuro, se sumarán al cuerpo de obra de los artistas”, puntualiza Víctor.
Vorágines, mundo(s) por venir, se inaugurará el 24 de octubre, a las 5:00 p.m., en el Centro de Artes de EAFIT. Para Valeria Mejía Echeverría, directora de Narrativas y Cultura de la Universidad es importante que los asistentes sepan que no se trata solo de una exposición de arte, “sino de muchos mundos y conversaciones que confluyen a través de piezas escultóricas y bibliográficas, fotografía, video, pintura, instalaciones, piezas de colección, mapas y tratados limítrofes, para brindarnos una lectura actual de esta novela, a luz de reflexiones y temas que siguen siendo actuales y vigentes”, expresa.
La directiva también agradeció la participación de Sura y de la Cinemateca Brasileira en esta muestra, quienes se unieron con el préstamo de varias de las obras de sus colecciones.
Sobre los artistas
Pablo González lleva 11 años radicado en Medellín, pero no olvida los morichales que hacen parte del paisaje tradicional de los Llanos Orientales, su lugar de origen. Por eso en sus obras, además de pintarlos con sangre, también aprovecha para hacer una denuncia sobre la quema indiscriminada de estos, para realizar proyectos de ganadería en esa región.
“Lo que hace José Eustacio Rivera en su libro, de alguna manera, es hablar de los exterminios de los pueblos y los territorios; de cómo se estaban acabando a partir de la explotación por la fiebre del caucho. En mi caso, con mi trabajo sobre los morichales, también busco expresarme sobre esto, pero desde otros territorios, desde mi región, y eso ha sido muy especial para mí”, comenta el artista.
Junto a él estará Felipe Flores, cuyo trabajo se relaciona con la investigación de archivo, las narrativas, las ficciones y la historia. Su propuesta, llamada Demasiada Cadencia, parte de una crítica que recibió en su momento José Eustasio Rivera y que decía que la obra tenía “demasiada cadencia en su parte estética y que se tragaba el resto de la obra”.
A partir de esto el artista trata de darle un giro a la crítica, tomar el concepto de “cadencia”, y, desde lo estético, mostrar que lo que el autor quería evidenciar era una denuncia social. “La cadencia también tiene que ver cómo con el movimiento del cuerpo y el desgaste de este. Por eso los materiales y recursos que uso también transmiten este mensaje”.
Así mismo, está la obra Nivelaciones Siembras Nocturnas, de Jhon Mario Ortiz, quien toma como referente las investigaciones científicas de Francisco José de Caldas y Alexander Humboldt, y sus viajes por la geografía de la Nueva Granada, retratando las diferentes especies vegetales para proponer, en una instalación, una reinterpretación propia de esos dibujos sobre estructuras tridimensionales.
Pablo Felipe y Jhon Mario son tres de los 40 artistas que estarán presentando sus obras en el Centro de Artes de EAFIT, gracias a una muestra curatorial que contó con la museografía de los profesores Efrén Giraldo Quintero y Mauricio Vásquez Arias, de la Escuela de Artes y Humanidades; Adelaida Acosta Posada, de la Escuela de Derecho; y del curador Víctor Muñoz.
¿Y por qué cuatro curadores?
Como esta exposición propone reflexiones desde diferentes perspectivas y preguntas, como las fronteras, la geografía y el territorio, los temas ambientales y jurídicos o la filosofía, la curaduría se realizó en grupo y de la mano de profesionales que pudieran proponer diferentes visiones y, al mismo tiempo, acompañar a los artistas.
Efrén Giraldo Quintero se sumó a este equipo con su experiencia sobre la literatura y el mundo vegetal en esta, mientras que Mauricio Vásquez Arias aportó sus conocimientos en torno a las creaciones transmedia y las producciones digitales. Finalmente, la profesora Adelaida Costa, contribuyó desde lo jurídico, ya que
La Vorágine plantea discusiones sobre los derechos humanos y las fronteras.
“La iniciativa de esta exposición es coyuntural, porque tiene que ver con la conmemoración del centenario de la publicación de esta novela, pero también nos pareció importante desarrollar un proyecto curatorial, museográfico, artístico que produjera nuevos efectos en la lectura de esta, efectos que veremos en la exposición, y que tiene que ver con la manera en la que Rivera nos propone visiones del futuro. Ese es nuestro objetivo, que quien la visite se lleve preguntas, inquietudes, y dilemas sobre la nación, la extracción, el consumo de los recursos o relación que tenemos con la naturaleza”, concluye Efrén Giraldo.