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Retos, nuevas ideas y muchas ganas de aprender: así van nuestros profes en esta nueva etapa
En 2021 nos conectamos con el aprendizaje y el cuidado para, de manera paulatina, volver a apropiarnos nuevament del campus eafitense, ocupar sus espacios y reactivar la vida universitaria.
• En el modelo combinado con enfoque de alternancia, cada profesor eafitense ha encontrado la mejor manera de adaptarse y responder a las necesidades académicas de la nueva normalidad. Y en este especial conoceremos, a través de sus testimonios, las experiencias, las anécdotas y los aprendizajes tras estos primeros meses.
• Tips para cuidar la voz o para enfocar la atención de los estudiantes en casa, hasta la manera como velan por la bioseguridad en el aula, en el campus y en su vida cotidiana, son algunos de los aspectos que abordan los docentes de las seis escuelas de la Universidad.
Uno se ideó la manera de conseguir un parlante del MercaLab para asegurarse que lo que estaba diciendo le llegara a todos sus estudiantes en la virtualidad; otro encontró que el uso de audífonos con el iPad era mejor que el micrófono externo cuando se trata de las prácticas en laboratorio; en otra de las sesiones cada semana es designado un cuidador que se encarga de velar porque todas las personas cumplan con las medidas de bioseguridad; y en algunos casos hasta se comparten tips sobre cuál es el tipo de tapabocas que, sin descuidar el bienestar, permite una mejor respiración mientras se imparte una clase.
Sin duda estos días en el modelo combinado con enfoque de alternancia han estado llenos de retos para los docentes eafitenses, pero también de anécdotas, experiencias positivas, reflexiones y aprendizajes que les han permitido mejorar cada sesión, y seguir permitiendo que el de EAFIT sea un campus para el aprendizaje y el cuidado.
Docentes de las seis escuelas de la Universidad comparten con todos nosotros cómo son sus clases, y cómo se han preparado, alistado y respondido a los retos pedagógicos de la nueva normalidad.
Mauricio Bejarano, con micrófono y parlante a mano
Aprender a proyectar su voz en un entorno que no ha sido el tradicional ha sido un reto para Mauricio Bejarano Botero, docente del Departamento de Mercadeo. Además de esta experiencia el profesor comparte cómo ha indagado sobre las necesidades e inquietudes de sus estudiantes.
La virtualidad y la presencialidad tienen sus propias ventajas
Y eso lo sabe Javier Correa Álvarez, de la Escuela de Ciencias, quien cuando se trata de simulaciones y multimedias se siente más cómodo desde la virtualidad, pero prefiere la presencialidad para las clases prácticas y los laboratorios.
Una conexión con más de 70 estudiantes de todo el país
Las clases de derecho de María Camila Naranjo Arango llegan, no solo a estudiantes de Medellín, sino hasta Urabá, el Chocó o Tolima. Cada semana uno de sus 70 estudiantes asume el reto de ser moderador o auditor, permitiendo una mayor fluidez de las sesiones y una recapitulación de estas, respectivamente.
Para Santiago Silva el mayor reto ha sido la imaginación
En lo primero que piensa Santiago Silva Jaramillo, de la Escuela de Derecho, al pensar en estos primeros meses de modelo combinado con enfoque de alternancia, es en la imaginación. Cada sesión implica, para el profesor, pensar en nuevas dinámicas y metodologías que incluyan, por igual, a los estudiantes presenciales y virtuales.
Sin dejar de lado la interacción social
Sí, para Catalina Gómez Toro de Economía es claro que debemos acostumbrarnos a la virtualidad durante estos tiempos, sin embargo la docente afirma que no se puede olvidar la interacción social, y es por eso que en sus clases presenciales son tan importantes las experiencias de aprendizaje activo, que les permite conocerse e interactuar entre ellos, y con sus profesores.
En una palabra: flexibilidad
Esa es la palabra que usa la profe Alejandra María Velásquez Posada, de la Escuela de Ingeniería, para resumir su experiencia en el modelo combinado con enfoque de experiencia. La docente señala que si bien estos han sido tiempos de cambios, eso no significa renuncias en contenidos o metodologías pedagógicas sino, al contrario, una manera para repotenciarlos.