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13/05/2020

​Espacios, cultura y bienestar 

La empatía, fundamental para la sana convivencia familiar


El manejo de las emociones y los sentimientos, la comunicación efectiva o asertiva, y la solución de problemas y conflictos son habilidades directamente relacionadas con el fortalecimiento del autocontrol. 

• Vivimos actualmente en otra cotidianidad. De un momento a otro, las dos, tres, cuatro o más personas que comparten una vivienda pasaron a estar presentes en esta las 24 horas del día, los siete días de la semana. Esto lleva a que el tema de la convivencia familiar cobre mayor relevancia en tiempos de cuarentena. 

• Estas son una serie de explicaciones y recomendaciones para mantener una sana convivencia en el hogar. Una clave es la empatía, pues solo al ponerse en el lugar del otro, tratarlo como quisiéramos ser tratados y asumir una actitud comprensiva se logrará mantener la armonía en la casa. Consulta más información en www.eafit.edu.co/saludmental


¡Alcemos la mano para hablar de convivencia familiar! Han transcurrido ya varias semanas en que la sociedad, por cuenta de los retos de salud pública de esta contingencia, ha asumido otros desafíos, en este caso por asuntos relacionados con la salud mental, el bienestar laboral y la convivencia familiar. La pandemia causada por el covid-19 ha transformado la cotidianidad de los individuos, lo que ha modificado las relaciones y las actividades humanas. La vida en la casa -ese espacio que comúnmente era destinado al descanso y al libre esparcimiento- ahora se convierte en el lugar para trabajar, estudiar, ejercitarse, practicar actividades artísticas y todo lo que por lo general se realizaba en diferentes sitios y con otras personas.

Esto puede generar una serie de emociones en las personas, ya que todo lo que ocurre en el día a día se reduce al mismo lugar, para el caso de quienes viven acompañados. 

Según Juan Fernando Herrera Piedrahíta, psicólogo clínico del Departamento de Desarrollo Estudiantil, se hace necesario empezar por reconocer a cada integrante de la familia o compañero de vivienda como un ser diverso, que requiere de sus pequeños espacios y tiempo en soledad. En ese sentido, el profesional especifica que no por estar todo el tiempo en casa juntos es necesaria la cercanía excesiva o la intrusión. Por eso, la invitación es a practicar la empatía, que consiste en comprender la realidad del otro y a respetar y entender sus angustias; a convertirse en ese otro cercano que lo acoge, no solo por sus vínculos de sangre, lazos de sangre o religiosos, sino como un acto de amor, de ternura, de comprensión, de respeto y tolerancia con el otro ser. 

Y puede ser, por ejemplo, que en muchas familias o entre compañeros de vivienda se presente una alteración en su convivencia. Ante esta situación, Nathalia Franco Pérez, jefa del Centro de Integridad, explica que “este es un reto para quienes vivimos con otras personas en nuestros hogares. De un momento a otro nos vimos frente a una realidad que no habíamos contemplado y es que ni los niños iban al colegio ni los adultos iban a su lugar de trabajo o estudio. Pasamos, entonces, a una convivencia de tres, cuatro, cinco o hasta seis personas en la misma casa, las 24 horas del día, los 7 días de la semana y que ya lleva varias semanas, lo que se convierte en un reto de tolerancia y adaptación al cambio en las rutinas cotidianas”. 

Así, controlar los impulsos y evitar tener reacciones fuertes o violentas con el otro es fundamental para mantener una convencia saludable con los demás integrantes del hogar. Esto es posible si se practica el autocontrol, que como lo explica Carlos Alberto Marín Monsalve, psicólogo del Departamento de Servicio Médico y Seguridad y Salud en el Trabajo, se refiere a la capacidad consciente de regular los impulsos de manera controlada, y así conseguir el equilibrio que genera estabilidad, aportar a la situación y conseguir lo que se pretende de manera efectiva y saludable. 

El autocontrol es una habilidad que siempre puede mejorar, lo importante es que las personas revisen en detalle lo que ha sucedido, cómo, cuándo y por qué o a causa de qué ocurrió. Posteriormente, realizar un ejercicio de auto observación cuando reaccionan impulsivamente, pues el autocontrol involucra emociones, pensamientos y, por supuesto, comportamientos.

Y es que como lo anota Juan Fernando, “es posible que se llegue a presentar una urgencia subjetiva, que puede ser tener crisis de ansiedad, irrupciones de angustia sin sentido o ataques de pánico; sensación de tristeza, depresión, estados de perplejidad, emociones o pensamientos que alteran la salud mental. Y si estas urgencias no logran ser llevadas a una narrativa y diálogo consigo mismo, van a desencadenar acciones agresivas o violentas que alteren la convivencia en la familia”.

Así se propone la auto observación 

Carlos Alberto indica que si una persona ha empezado a notar que tiene inconvenientes con el control de sus impulsos podría comenzar por escribir lo siguiente: 

  1. ¿Cuál fue la situación en que esto ocurrió?
  2. ¿Qué sintió en ese momento, a nivel emocional y físico?
  3. ¿Qué pasó por su mente? (imágenes y pensamientos. A las personas les da dificultad identificarlos ya que son rápidos o hasta imperceptibles, pero hay que hacer la tarea de identificarlos).
  4. ¿Qué hizo? ¿cómo reaccionó? ¿qué dijo?
  5. ¿Cuáles fueron las consecuencias? (generalmente son negativas).

Y como un plus al ejercicio anterior, Monsalve agrega que sería bueno también escribir ¿qué pasó por alto? ¿cómo debe mejorar? y ¿cómo reaccionaría la próxima vez? Teniendo en cuenta también perdonarse y pedir perdón a los demás. 

Otro ejercicio consiste en que, frente a la situación que ya se haya identificado sentir malestar, ira y que ya ve que puede reaccionar impulsivamente, hacer lo siguiente:
  1. Contar hasta 10.
  2. Tomar un vaso con agua.
  3. Caminar (pero debido al confinamiento puede simplemente cambiar de espacio).
  4. Hacer 10 ejercicios de respiración profunda.
  5. Escribir también lo indicado anteriormente.

Otro factor importante para preservar una sana convivencia familiar es aprender a identificar la violencia, denunciar y buscar ayuda a tiempo. Ante esto, Diana Carolina Gómez Restrepo, jefa del Departamento de Servicio Médico y Seguridad y Salud en el Trabajo, hace un llamado a no permitir que se normalice ningún tipo de violencia. “Hay familias que ya se acostumbraron, por ejemplo, a un tono de voz elevado, o al maltrato psicológico, o incluso a la violencia física. Y la costumbre hace que ayudar a estas personas sea más difícil, pero se debe actuar”. 

Para esto, Diana Carolina recuerda que en Servicio Médico pueden encontrar la ayuda que necesitan, y la importancia de que todos alcemos la mano.  De igual forma recuerda las líneas de WhatsApp establecidas para los ciudadanos 3154064194 y 3214677071, o también se pueden comunicar con el 123.

¿Qué rutinas, ejercicios o prácticas pueden favorecer la convivencia familiar?


Nathalia Franco sugiere las siguientes prácticas para compartir en familia y construir juntos un ambiente de armonía que haga más saludable y constructiva la convivencia en el hogar.

Establecer horarios y rutinas claras
Hacer acuerdos de levantarse a una hora, bañarse, desayunar, estudiar, trabajar y hacer las pausas necesarias para relajar la mente y reactivarse. Es importante también que todas las personas que conviven se comprometan con unos deberes y adquieran responsabilidades. Eso permite que se sienta el compromiso de cada uno de los integrantes del hogar.

Identificar qué asuntos están originando los conflictos
Mirar si es un asunto de que una persona está más recargada del trabajo doméstico, o si es cuestión de sentarse a conversar y compartir con el otro cómo estuvo su día, o qué está haciendo el otro en su trabajo o en su estudio.

Tiempo de calidad en familia
Ver una serie o una película, leer, hacer ejercicio, cocinar, compartir momentos que generen alegría, placer y bienestar, pueden favorecer los lazos y la convivencia familiar.


La U siempre está dispuesta a acompañarnos


La Universidad dispuso de una línea para los empleados administrativos y los docentes que requieran de ayuda. Se trata de la línea de Coomeva 018000918082 opción 2, opción 4 que funciona las 24 horas del día los siete días de la semana.

A su vez, en el correo servicio.medico@eafit.edu.co los empleados que lo requieran puedan acceder a una cita médica o psicológica a través de los medios virtuales.

Última modificación realizada el 13/05/2020 11:58 por Aura Maria Giraldo Murcia