Por las dependencias
La Universidad obtuvo premio nacional por su gestión en sostenibilidad y buenas prácticas laborales
En 2019, la Universidad participó en este reconocimiento y fue finalista. Este año comparte el premio con la Fundación Universitaria del Área Andina y la Universidad Simón Bolívar. Foto de archivo.
• Por su compromiso con la atracción del talento humano, el bienestar y la calidad de vida de los empleados docentes y administrativos, la gobernanza, la diversidad y la inclusión, la Universidad obtuvo, el viernes 4 de diciembre, el Premio Colombiano de Sostenibilidad a las Buenas Prácticas Laborales.
• El reconocimiento, que entregan la Federación Colombiana de Gestión Humana y el Centro Internacional de Responsabilidad Social, premió a la Institución en la categoría de entidades y universidades sin ánimo de lucro, entre otras 17 institucionales postuladas.
En EAFIT es claro que el mayor acervo y riqueza institucional es su comunidad universitaria, y así lo evidencian sus Principios Rectores de Respetamos a los estudiantes, Acompañamos a los Egresados, Valoramos a los profesores y Crecemos con los empleados. Y especialmente por su compromiso con los dos últimos de estos, la Institución obtuvo, el pasado viernes 4 de diciembre, el Premio Colombiano de Sostenibilidad a las Buenas Prácticas Laborales.
Se trata de la tercera edición de este reconocimiento que entregan la Federación Colombiana de Gestión Humana y el Centro Internacional de Responsabilidad Social y Sostenibilidad, y que reconoce a las organizaciones privadas, públicas y sociales del país que, a través de la gestión integral del talento humano, contribuyen al desarrollo sostenible y crean impactos positivos en las personas, en las mismas organizaciones y en la sociedad.
La Universidad obtuvo el galardón en la categoría Esales, donde se evalúan las entidades sin ánimo de lucro y las universidades, gracias a sus buenas calificaciones en los aspectos relacionados con atracción y retención del talento humano, bienestar y calidad de vida, compensación, gobernanza, relaciones laborales, y diversidad e inclusión, entre otros.
“El año pasado habíamos participado y quedamos como finalistas, pero esa experiencia fue de gran valor pues nos permitió identificar esas áreas que debíamos seguir creciendo y fortaleciendo. Este año, al postularnos de nuevo, obtuvimos el reconocimiento junto a la Fundación Universitaria del Área Andina y y la Universidad Simón Bolívar”, menciona Luz Amparo Posada Ceballos, directora de Desarrollo Humano-Bienestar Universitario.
La directiva también resalta que el Premio es para toda EAFIT, pues reconoce las buenas prácticas laborales que se aplican, el aporte a la vida de las personas, los beneficios para los eafitenses y sus familias y, en general, un voto de confianza a toda la gestión que realiza la Universidad para que los empleados tengan un crecimiento integral.
Por su parte, Alexandra Ocampo Peláez, jefa de Desarrollo de Empleados, y quien también lideró el proceso de postulación, asegura que este resalta “ese ADN de la Universidad en el que siempre han sido claros los principios de Crecemos con los empleados y Valoramos a los docentes. Somos una organización que piensa y que contribuye, a la luz de los ODS, a ser referentes y transformadores de sociedad”.
Y agrega que otro de los aspectos positivos es ver que la calidad que siempre ha distinguido a la Institución en lo que se refiere a temas académicos e investigativos, también se vive con las personas y colaboradores que trabajan para la Universidad.
Un llamado a seguir cumpliendo los Principios Rectores de la Institución
El método de evaluación para el Premio es el siguiente: después de la postulación, como explica Alexandra Ocampo, se debe responder un cuestionario por bloques temáticos de acuerdo con el cumplimiento que cada Institución tiene de ellos. Una vez se envía, se realiza una auditoría en la que se contrarrestan las respuestas de la autoevaluación para saber si estas son adecuadas, subvaloradas o sobrevaloradas. Todo esto permite emitir, por parte del jurado, una calificación que, en el caso de la Universidad, fue positiva y le permitió obtener este galardón.
“Yo resaltaría, además, que logramos ser reconocidos entre otras 17 entidades de nuestra categoría, y entre cerca de 120 empresas participantes que, en total, impactan a unas 216 mil personas desde sus prácticas orientadas a la responsabilidad social y el manejo de las relaciones laborales”, apunta Alexandra.
La jefa de Desarrollo de Empleados también afirma que, así como en el caso de los ránquines, la Universidad no trabaja para los premios, pero que estos son un reconocimiento a la buena gestión que se realiza desde diferentes estamentos institucionales. “Nuestro compromiso, ahora, es seguir materializando esos Principios Rectores, certificarnos como una empresa familiarmente responsable, y seguir por esa senda de la calidad. Este premio es un faro que nos alumbra el camino”, concluye.