Transparencia por Colombia celebró 20 años y la Universidad es parte de esa historia

Las capacidades académicas y de investigación de EAFIT han sido herramientas importantes en estas dos décadas de trabajo por combatir la corrupción en Colombia.

Transparencia por Colombia celebró 20 años de trabajo continuo por visibilizar la corrupción y los daños que genera a las personas, las comunidades y al país, así como de poner la lupa sobre actitudes culturales, corporativas y públicas que se han hecho comunes a los ojos de los ciudadanos, a pesar de tratarse de ser actos de corrupción. En el evento, la noche del martes 20 de noviembre en Bogotá, EAFIT estuvo presente por ser una de las instituciones aliadas de esta organización.

En su propósito por lograr un país libre de corrupción, en donde el fenómeno no sea tolerado, esta organización cuenta hoy con la ayuda de 150 auditores ciudadanos y de organismos estatales, empresas privadas, organizaciones civiles e instituciones de educación superior en los 32 departamentos. Entre las empresas comprometidas con la causa se encuentran Grupo Bolívar, Organización Corona, Grupo Argos, Bodytech, Compensar, Telefónica, Caracol TV, Nutresa, Organización Terpel y Homecenter.

EAFIT se encuentra en el grupo de universidades que, con la Universidad de los Andes, Universidad de Nariño, Universidad del Rosario, Universidad Externado de Colombia y la Universidad Nacional de Colombia, conforma diversos escenarios de discusión, investigación y formación en temas relacionados con la corrupción.

"EAFIT hace parte de Transparencia por Colombia casi desde sus orígenes. La Universidad tiene una responsabilidad ética con la sociedad de participar en estos espacios e impulsar políticas anticorrupción, un compromiso reforzado a través de la creación del Centro de Integridad de la Institución. La ética y la transparencia hacen parte del ADN eafitense, y es un deber no solo comportarse de manera íntegra y ética como universidad, sino también formar estudiantes y docentes en estos temas", expresa Isabel Gutiérrez Ramírez, directora de EAFIT Bogotá.

En palabras de Isabel, quien representó a la Universidad en la celebración de Transparencia por Colombia, EAFIT tiene el compromiso de formar a los próximos empresarios y funcionarios públicos de Colombia, con un sello especial en materia de ética, transparencia, integridad y no corrupción. Por eso, para la Institución es de suma importancia que, luego de dos décadas de existencia, este capítulo nacional de la organización Transparencia Internacional siga vigente y conquistando nuevos escenarios, en cuyas decisiones y discusiones participa la Institución.

En ese sentido, y de acuerdo con la directora EAFIT Bogotá, la Universidad aporta al pacto Transparencia por Colombia su capacidad institucional en el trabajo con pequeñas y medianas empresas, a través del análisis de sus cadenas de valor para identificar los puntos más vulnerables a la aparición de oportunidades de corrupción, con el fin de que estas puedan generar mayores niveles de alerta y, posteriormente, prevenirla. 

"También tenemos un papel importante en la investigación de buenas prácticas en materia de financiación de campañas políticas. La idea es identificar cuándo se incurre en malas prácticas, y hacemos un análisis juicioso para identificar los sectores de la economía donde hay mayor riesgo de corrupción", resalta Isabel, a la vez que ratifica el compromiso de la Universidad para seguir trabajando en el pacto.

Gerardo Andrés Hernández Montes, director de Transparencia por Colombia, considera a EAFIT como un elemento clave dentro de las iniciativas trabajadas actualmente en ese organismo, por lo que la organización está constantemente en la búsqueda de nuevos espacios para seguir articulando la labor académica al trabajo de la entidad.

"Las universidades son fundamentales en la formación para generar la posibilidad de un cambio estructural, a largo plazo, respecto a la corrupción en Colombia. Si fortalecemos la educación de nuestros futuros profesionales, cuyas decisiones serán influyentes en los ámbitos público, privado, social, artístico, entre otros, y no limitamos la enseñanza de la ética a los semestres finales, de manera accesoria, sino que la hacemos transversal a la profesionalización, haremos un aporte profundo para generar interés por el cuidado de lo público", aseguró el directivo.

Producir conocimiento y generar espacios de análisis están también, desde el punto de vista de Andrés, entre los grandes aportes del sector académico para ayudar a entender cómo funciona la corrupción y cuáles son las consecuencias de su accionar en muchos sectores de la sociedad. Es decir, poner a las universidades al servicio de resolver una problemática que, actualmente, es de las más preocupante para los ciudadanos.

Para EAFIT es claro, de acuerdo con Gabriel Jaime Arango Velásquez, director de Formación Integral de la Universidad, que su misión es ampliar el ámbito de la conciencia humana, el razonamiento y la elaboración de argumentos para que las personas sean capaces de tomar decisiones de manera responsable y ética.

"Eso solo es posible si las personas pueden adoptar y seleccionar conscientemente sus formas de pensar, sentir, obrar y comportarse. La educación debe ser ilustradora y sustentadora de esas elecciones del ser humano, y lo tiene que hacer de una manera explícita e intencionada", argumenta Gabriel Jaime.

Los 20 años de recorrido de Transparencia por Colombia permiten que la corrupción no sea hoy un tema menor, sino un fenómeno al que se le presta atención desde todos los frentes de la sociedad.  "Logramos que esta se aborde desde la perspectiva de aporte, y no solo de crítica, para cuidar lo que es de todos, por encima de intereses particulares. Si bien falta mucho por hacer, creo que, como sociedad, somos más conscientes a la hora de plantearla como problemática. También hubo avances en las capacidades normativas e institucionales nacionales y, aunque esta no se combate solo con normas y nuevas instituciones, sí se trata de elementos fundamentales para generar nuevos caminos e instrumentos", celebró Andrés Hernández. 

El avance en normativas obedece al camino allanado en convenciones internacionales o en regulaciones alrededor de temas como el acceso a la información pública, la rendición de cuentas, el soborno transnacional y la lucha contra el crimen organizado.

Además de contar con la presencia de Delia Ferreira Rubio, presidenta de Transparencia Internacional, organización presente en 112 países a través de una red global de lucha contra la corrupción, la celebración de las dos décadas de Transparencia por Colombia contó con la presencia de empresarios y funcionarios estatales de alto nivel, entre ellos el presidente Iván Duque para quien es importante tener la misma contundencia frente a todos los crímenes, sin tratamientos diferenciados.

"Todos los crímenes son formas de corrupción. En Colombia no podemos tratar unos crímenes rasgándonos las vestiduras y después ser tolerantes con otros, o tratar de matizarlos u ocultarlos a través de discursos señoriales", concluyó el mandatario durante el evento.