Una vicerrectoría donde el estudiante es el centro 

Este es el grupo primario de esta nueva unidad directiva de la Institución, que desde el momento en que fue creada tiene como reto enfocar sus esfuerzos en el proceso de aprendizaje de los alumnos. 

Primero fue la emoción, luego el sentimiento de honor por este reconocimiento y, finalmente, el llamado al trabajo duro y a responder con altura a la nueva responsabilidad que se le había asignado. Fue así como Claudia María Zea Restrepo le dio la bienvenida al 2018, un año en el que asume un nuevo reto como Vicerrectora de Aprendizaje de EAFIT.

“Este 2018 nos encuentra estrenando una nueva Carta Organizacional. Tenemos tres vicerrectorías —dos de estas en pleno funcionamiento— y estamos seguros de que este proceso de revisión y reestructuración nos dará frutos muy fecundos”, expresa Juan Luis Mejía Arango, rector de la Institución.

Han sido días enteros de reuniones, de evaluar tendencias, conocer perspectivas y recoger el mayor conocimiento posible de lo que significa ser una universidad enfocada en el aprendizaje. “Siempre me han gustado los retos, sobre todo los que implican hacer innovaciones y transformaciones que toquen la vida de las personas. Por eso reitero que siento mucha gratitud por este nombramiento, pero también comprendo la responsabilidad que significa”.

Y para cumplir con este reto, Claudia asegura que cuenta con un equipo humano en el que ve las ganas y la convicción de trabajar por un mismo objetivo. “En la Universidad todo está relacionado con el aprendizaje y todos estamos comprometidos con eso”.

Y, precisamente, convertir al estudiante en el protagonista de su propio proceso de aprendizaje y asumir la responsabilidad de que su formación profesional sea una experiencia de vida requiere, por un lado, de todos los recursos y apoyos que garanticen esas condiciones de excelencia y, por el otro, de este equipo humano que acompañe y fortalezca todas las dinámicas propias de esta gestión. 

Desde la conformación de la Vicerrectoría de Aprendizaje, dependencias como el Centro de Integridad Académica, Mercadeo Institucional, Admisiones y Registro, el Departamento de Prácticas Profesionales, la Dirección de Formación Integral (antes Dirección de Docencia), y el Centro de Excelencia pasaron a integrar esta unidad para sumar esfuerzos orientados a cumplir con la mega estrategia de la unidad y sus objetivos.

Se trata de una tarea que no desempeñarán solos, pues el trabajo con otros aliados como las Vicerrectorías de Descubrimiento y Creación, y Administrativa y de Proyección Social, así como todas las unidades que están cruzadas por el tema de formación y aprendizaje como la Universidad de los Niños, Educación Continua EAFIT, Idiomas EAFIT, Escuela de Verano, Alta Dirección, entre otras, será fundamental para crear, conectar, descubrir, evaluar, asegurar e impactar de manera positiva al estudiante y su proyecto de vida.

La Creación de la Vicerrectoría de Aprendizaje también produjo modificaciones en algunas de sus unidades, como la dependencia liderada por Gabriel Jaime Arango Velásquez. Y es que la anterior Dirección de Docencia hoy tiene una apuesta más amplia orientada a fortalecer y asegurar la formación integral tanto de estudiantes como de maestros.

Por ese motivo, su unidad pasó a llamarse Dirección de Formación Integral, como una manera de alinearse completamente a la mega estrategia de la Vicerrectoría. Se trata de un término de origen alemán que, en palabras del directivo, no solo se centra en saberes específicos sino en la formación de los estudiantes como seres humanos, ciudadanos y profesionales integrales.

“Y eso será también una plataforma para los docentes, pues podrán formarse en su ejercicio y facilitar entornos reflexivos y pedagógicos para sus estudiantes. Van a estar en una permanente reflexión crítica de sus prácticas, para transformarlas y permitir que el estudiante sea un ser más autónomo y capaz de su propia formación y desarrollo”, expresa el director de Formación Integral.

Aunque en años anteriores el Centro de Integridad ya había trabajado con Claudia Zea y algunas de las áreas que integran la Vicerrectoría de Aprendizaje, con esta reestructuración se formaliza la transversalidad de los temas de ética e integridad en la formación de los estudiantes. Por eso Nathalia Franco, jefa de esta dependencia, no solo cree que la creación de la unidad es una decisión muy acertada, sino que manifiesta su compromiso de unirse a esta con el deseo y la disposición de aprender a aprender de las otras unidades, de responder a los retos y de ver cómo el Centro de Integridad puede nutrir el discurso de esta Vicerrectoría.

Para Jorge Tabares Mesa los últimos meses han sido de cambios, reuniones, grupos primarios y sesiones de trabajo con compañeros que, si bien conocía, todavía no había tenido la oportunidad de trabajar con ellos antes. Pero esto, a su vez, también ha sido una motivación para sumarse con compromiso y muchas expectativas a los procesos de la Vicerrectoría de Aprendizaje.

Y es que, como jefe del Departamento de Prácticas Profesionales, es consciente de que es en esa primera inserción en el mundo laboral donde se ve reflejado el proceso de aprendizaje que ha vivido un eafitense. Por eso considera muy importante y acertado enfocar todas las directrices para garantizar que el estudiante esté en el centro de todo dicho proceso.  

“Y, de esta manera, el Depp podrá entregarle a la Universidad un insumo muy importante por parte de lo que las organizaciones opinan de nuestros estudiantes y evidenciar como su proceso de formación es garantía de calidad y excelencia”, señala el directivo.