Sin dar tiempo a preparación alguna, violines, violonchelos, trombones, tubas, cornos, trompetas y percusión sueltan una andanada vertiginosa de notas musicales sobre los espectadores, atendiendo a los movimientos enérgicos de quien dirige la pieza: la Sinfonía N°6 en Mi menor, compuesta por el británico Ralph Vaughan Williams.
La composición, exigente para intérpretes y escuchas por partes iguales, será tocada en Medellín en el XII Concierto de temporada de la Orquesta Sinfónica EAFIT, Orquestas Unidas. En este, los músicos unirán su talento al virtuosismo de la Orquesta Filarmónica de Medellín para acometer, entre otras tonadas, la escrita por Vaughan. La cita será este jueves 16 de agosto a las 8:00 p.m. en el Teatro Metropolitano.
"Se trata de una obra muy demandante y, por eso, debemos aprovechar esta ocasión, en la que contamos con un recurso orquestal como este, de gran formato. Cada conjunto tiene sus fortalezas, pero la sumatoria aporta mucho, pues se comparten dificultades y surge un resultado muy bonito e interesante cuando estas se sortean", aseguró la maestra Cecilia Espinosa Arango, directora de la Orquesta Sinfónica EAFIT.
Las otras obras que serán interpretadas en esta velada, cuya dirección está a cargo de Cecilia, son Suite Concertante Op. 178, de Blas Emilio Atehortúa, y Danza Concierto para Clarinete y Orquesta, de Stephen Gryc. Esta última contará con la participación de Sebastián Plata, clarinetista colombiano radicado en Luxemburgo.
"Blas Emilio es uno de los compositores más importantes del país y, a pesar de ser contemporáneo, tiene un lenguaje consonante fácil de asimilar. De otro lado, la obra de Stephen Gryc, compositor norteamericano de ascendencia sueca, surge de un artista con lenguaje propio y característico, aunque la pieza se ciñe al formato de concierto, con tres movimientos y una pequeña cadencia", explicó la maestra Cecilia.
El estreno mundial de dicha obra, según refiere Sebastián Plata, fue en 1992, en la Universidad de Alabama (Estados Unidos). En esa oportunidad la orquesta estatal acompañó al clarinetista Scott Bridges, así como ahora el clarinete de Plata, a quien Cecilia Espinosa considera como uno de los clarinetistas jóvenes más destacados de Colombia, quien tendrá la oportunidad de brillar con el acompañamiento de las dos orquestas profesionales de la ciudad.
"El clarinete es un instrumento que evoca la nobleza, por su timbre sonoro tan rico en armónicos. También evoca vitalidad y versatilidad, por medio de la agilidad que posee en la familia de las maderas. El concierto que voy a tocar fue dedicado a la memoria del gran clarinetista Benny Goodman. En esa obra, sin tratarse de música jazz y acercándose más a un concierto posromántico, hay partes muy breves en las que se nota el swing del jazz", manifestó Sebastián Plata.
De esa manera, y con la armonía conseguida por una megaorquesta, el espectador, quien quizás ya se haya recuperado del embate inicial cuando el arpa llegue a entregarle un respiro, en la pieza compuesta por Vaughan, tendrá la oportunidad de deleitar sus oídos con la capacidad interpretativa de los mejores músicos de Medellín.
Las entadas al evento tienen un precio de 40.000, 60.000 y 80.000 pesos, y pueden conseguirse en la taquilla del Teatro Metropolitano, Plaza Mayor, y Todo en Artes de los centros comerciales El Tesoro, Los Molinos y Santafé, y puestos de revistas de los almacenes Éxito.