​Por las dependencias

Un certificado que brinda seguridad en el desarrollo de las investigaciones eafitenses

El Laboratorio de Procesos es el lugar en el que se hace uso controlado de estos elementos por parte de académicos de las escuelas de Ingeniería y Ciencias.

• El Ministerio de Justicia y del Derecho otorgó, por primera vez a la Universidad, el certificado de Carencia de Informes por Tráfico de Estupefacientes.

• El documento permite el control en el uso de algunas sustancias químicas que, en el caso de EAFIT, son utilizadas con fines académicos e investigativos.

Se llama Certificado de Carencia de Informes por Tráfico de Estupefacientes. Este documento permite que las entidades e instituciones que lo portan hagan el uso controlado de sustancias químicas en el desarrollo de sus actividades.

Para el caso de EAFIT, según Édgar Darío Arbeláez Henao, coordinador del Laboratorio de Procesos, de estos químicos se manejan cerca de 22 sustancias en la Institución, de las que cuatro no se podrían obtener sin la existencia de dicho certificado.

“ Popularmente se le conoce como certificado de estupefacientes y lo expide el Ministerio de Justicia y del Derecho a entidades privadas y del Estado, con el fin de realizar control a ciertas sustancias químicas que pueden ser destinadas, directa o indirectamente, a la extracción, transformación y refinación de drogas ilícitas, pero que en nuestro caso son usadas para fines académicos”, comenta Édgar.

Del grupo de 32 sustancias restringidas EAFIT emplea 22 para apoyar el desarrollo de actividades de pregrado y posgrado, investigación, prácticas de laboratorio y en la atención de servicios a terceros. 

Estas actividades son propias de las escuelas de Ingenierías y Ciencias, unidades que hacen uso de estos químicos controlados, gracias al apoyo de un técnico encargado en el manejo de sustancias. Además, existe un procedimiento interno y un sistema de control en el que se lleva información de los consumos. 

“Todo se soporta en la plataforma Sicoq del Ministerio, en la que se lleva control, de acuerdo con la necesidad de la práctica. Así, es a través del coordinador de área o el coordinador de un proyecto de investigación que se entregan las cantidades para la actividad puntual en la que se necesite”, indica Édgar.

Además, para garantizar el buen desarrollo de los proyectos que están en curso y que hacen uso de estas sustancias, se cuenta con estantes adecuados, sistema de seguridad, entradas de aire, demarcación de la zona, cámaras de seguridad, extintores para constatar que es seguro su manejo, entre otras medidas.

Édgar comenta que el proceso de solicitud de este certificado duró uno 15 meses y, para obtenerlo, se requiere de mucha información de los distintos grupos de investigación, de las personas que visitan el laboratorio y de una proyección de las cantidades que se van a manejar. 

Por eso, para solicitar el certificado la Universidad creó un comité de sustancias químicas conformado por representantes de los departamentos de Ingeniería de Procesos, Ciencias Biológicas y Ciencias Físicas; una persona de la Dirección de Investigación y otra del Departamento de Compras. Ellos se reunieron de forma periódica y cumplieron con las distintas etapas que se requerían para esta solicitud, entre las que están diligenciar información, hacer una presolicitud, cumplir con unos requisitos técnicos especiales y recibir la visita de la Policía Nacional. 

Por esto, este certificado constituye un logro para la Universidad ya que, según Édgar, otras instituciones llevan un buen tiempo tratando de obtenerlo, pero se quedan en el camino por las demoras en el proceso. Este certificado tiene una vigencia anual.