Actualidad eafitense
Las sesiones de Autoevaluación, un proceso que conduce a grandes cambios
Los asistentes a estas sesiones, previamente designados, son guiados por los integrantes de la Dirección de Planeación.
• Del 7 de septiembre al 14 de octubre se realizan las sesiones de Autoevaluación Institucional con estudiantes, docentes y directivos de EAFIT. El objetivo es evaluar el camino recorrido e identificar las opciones de mejora.
• En total se analizan 12 factores, con sus respectivas características, y sus calificaciones se convertirán en uno de los insumos principales para la elaboración del informe final que se entregará al Consejo Nacional de Acreditación.
El primer semestre fue de preparación: se definieron los cronogramas, se realizaron los talleres de sensibilización; se elaboraron los instrumentos de medición; se recogieron las apreciaciones y se posicionó, dentro de la comunidad eafitense, el mensaje de compromiso institucional con la Autoevaluación Institucional.
Ahora, en esta segunda mitad del año, la Universidad continúa avanzando con este proceso fundamental para la renovación de la Acreditación de Alta Calidad del Ministerio de Educación Nacional. De esta manera, y de la mano de la Dirección de Planeación, se vienen adelantando las sesiones de Autoevaluación.
Estudiantes y docentes; jefes, coordinadores y directores; representantes ante los diferentes estamentos de la Universidad; administrativos e integrantes de diferentes comités de EAFIT han sido invitados a evaluar los avances de la Institución en 12 factores diferentes.
Para esto, el equipo asesor de la Dirección de Planeación ideó un cronograma de sesiones que comenzó el 7 de septiembre, y que se extenderá hasta el próximo 14 de octubre. “Estas reuniones tienen como propósito evaluar los desarrollos de la Universidad desde la anterior Acreditación, y mirar, con base en las declaraciones institucionales, cómo se ha logrado ese crecimiento”, explica Mario Alexander Orozco Arcila, asistente de esta Dirección.
Según el administrativo, se trata de un examen de coherencia en el que se contrastan las declaraciones de la Institución con lo que se hace y con lo que se logra. Para esto, los grupos de autoevaluación disponen de información derivada de indicadores documentales, estadísticos y de opinión, que les permiten tener criterio, y emitir juicios de valor y calificaciones.
Mery Tamayo Plata, docente del Departamento de Economía y coordinadora de la maestría en Economía, asistió a una de las sesiones del miércoles 21 de septiembre. La profesora, quien fue designada por el Consejo de la Escuela de Economía y Finanzas, participó en la evaluación del factor Procesos Académicos.
“Todo fue muy claro. La Dirección de Planeación, previamente, nos había enviado un documento para estudiarlo. Luego, en la reunión, nos presentaron la información que habían recopilado sobre este factor. Todo esto nos dio elementos de juicio para el espacio de debate y, al final, otorgamos una calificación”, explica la eafitense.
Mery agregó, además, que esta experiencia le permitió ver cómo otros eafitenses perciben sus escuelas y procesos, y destaca estas actividades de Autoevaluación como una oportunidad de mirar el camino recorrido, recoger recomendaciones y encontrar opciones de mejora.
“Valoro mucho que las sesiones tengan personas de diferentes disciplinas, porque los procesos de autoevaluación llevan a pensarse y a revisarse en profundidad. De esta manera, si todos podemos opinar y participar, el mejoramiento va a ser mucho mayor”, dice la docente.
Además del tema de Procesos Académicos, otros de los factores que se analizan durante la agenda de sesiones son: Misión y Proyecto Institucional; Profesores; Estudiantes; Investigación y Creación Artística; Procesos de Autoevaluación y Autorregulación; Organización, Administración y Gestión; Visibilidad Nacional e Internacional; Pertinencia e Impacto Social; Bienestar Institucional; Recursos de Apoyo Académico e Infraestructura Física; y recursos Financieros.
Mario Orozco comenta, además, que cada uno de estos factores tiene sus propias características y criterios para analizar.
Un insumo para seguir creciendo
Como Mery Tamayo, los otros asistentes a estas sesiones fueron previamente designados y su participación se relaciona de acuerdo con los diferentes factores a evaluar.
El profesor Juan Carlos López Díez, por ejemplo, estuvo invitado a la reunión sobre Investigación y Creación Artística, debido a su experiencia en este campo y a su desempeño como director del Grupo de Investigación en Historia Empresarial, de la Escuela de Administración.
“En lo personal, considero que el ejercicio de mirarnos es muy saludable para la Universidad, para sus procesos, lineamientos estratégicos y visión de futuro, todo esto enmarcado en una filosofía de mejoramiento continuo”, señaló el docente.
Justamente, y como explica Mario Orozco, el material que se recoge en cada una de estas sesiones es vital para el proceso de Autoevaluación. Por eso, de cada una de estas se generan actas que recogen las diferentes calificaciones con sus argumentos, y que se convertirán en el insumo principal para el informe que se entregará ante el Consejo Nacional de Acreditación.
Para finales de este año se tiene prevista la elaboración de un borrador del informe final y, a comienzos de 2017, se realizarán las últimas revisiones y ajustes antes de su entrega.
“Las personas que participan en las sesiones de Autoevaluación cumplen un rol muy importante para el progreso de la Universidad. En EAFIT los procesos de Autoevaluación han conducido a grandes cambios y esperamos seguir contando con ese apoyo para seguir por ese camino de crecimiento”, concluye el asistente de Planeación.