Por las dependencias
Los ‘profes’ de portugués son ejemplo de solidaridad
Los profesores disfrutaron de un almuerzo de agradecimiento con el que EAFIT reconoció su disposición y solidaridad ante el incidente.
• El lunes 28 de noviembre, el mundo entero se sobresaltó con una tragedia aérea en la que murieron 71 personas, pertenecientes al equipo de fútbol Chapecoense.
• Antioquia se solidarizó con el suceso y, entre la masiva ayuda a las víctimas, se destacó la de los profes de portugués de Idiomas EAFIT, quienes apoyaron en la traducción de esta lengua.
Una vez más se afianza eso que dicen de que ‘los colombianos son muy hospitalarios, buena gente y solidarios’, pues ante el mortal episodio sucedido el lunes de 28 de noviembre, con el accidente de la aeronave Lamia que transportaba a más de 70 personas del equipo Chapecoense (de Brasil), la ayuda no se hizo esperar.
Decenas de personas entre bomberos, especialistas en rescate, médicos, autoridades locales y departamentales, y vecinos del municipio de La Unión (Antioquia) acudieron a prestar su apoyo ante esta situación.
Entre los voluntarios estaban los profesores de portugués de Idiomas EAFIT, quienes, de forma inmediata, tomaron la iniciativa de ayudar. “Hubo un llamado del aeropuerto Olaya Herrera en Medellín, que buscaba personas que tradujeran el idioma y que acompañaran a las familias de las víctimas, quienes llegarían a Rionegro al día siguiente de la tragedia”, relata Julián Monsalve Correa, uno de los asistentes, quien agrega que de inmediato los profesores de portugués conversaron sobre el asunto, pararon sus clases y se fueron al aeropuerto.
Y, aunque la Fuerza Aérea Brasileña canceló el vuelo en el que iban a llegar las familias, por motivos que indicaban que no era necesario su traslado a Rionegro, “llegó una cantidad importante de brasileños que viven aquí en Medellín, también de estudiantes y egresados, muchos de ellos de EAFIT, para ayudar”, dice Julián.
Para Thomas Treutler, director de Idiomas EAFIT, este gesto es muy bonito, porque no solo hubo respuesta, sino que esta fue inmediata. “Así, al nosotros recibir varios llamados de diferentes partes de la Universidad, y del sector público y privado, lo que hicimos fue delegar en Claudia Gil y Sara Gennari la coordinación de las solicitudes, la respuesta a las llamadas, la resolución de inquietudes y la gestión con los profesores de portugués”.
Teresa Luna Pabón, una de las profesoras, fue convocada directamente por Juan Carlos de la Cuesta, presidente del Club Atlético Nacional. Ella, que estuvo desde muy temprano en el lugar, asegura que había mucha gente colaborando, tanta que hubo, al principio, poco por hacer.
Y es que para estos docentes era inconcebible seguir como si nada hubiese pasado ante esta tragedia. “Lo sentimos como algo muy particular, porque nosotros somos quienes enseñamos portugués aquí en Medellín. Sentimos un compromiso muy grande pues, además, hay muchos profesores que son brasileños y les tenemos un cariño especial a esta nación”, señala Julián.
Como ellos, muchas personas de diferentes profesiones sintieron el deseo de ayudar y poner sus conocimientos al servicio de quienes lo necesitaron durante las labores de rescate y en los días posteriores al accidente.
Por esto, a ellos, y en nombre de todos los que acudieron para poner de su parte en este acontecimiento que marcó la historia del fútbol mundial, la Universidad los reconoció por su entrega desinteresada, su actitud siempre dispuesta y su generosidad con la situación, que fue una oportunidad para demostrar su cariño por el idioma y por esta nación hermana.