• Esta dependencia de la Institución se creó como organismo asesor de la Rectoría y de la comunidad universitaria en general, para apoyar el direccionamiento estratégico.
• Su principal reto es contribuir con el aseguramiento de la calidad académica, a través del apoyo a los procesos de obtención y renovación de los registros calificados, y acreditación institucional y de programas.
Un equipo de trabajo diverso y comprometido con la Institución es el que conforma la Dirección de Planeación, dependencia responsable de orientar y acompañar los procesos de autoevaluación, acreditación, registro calificado y planeación estratégica y operativa.
Su trabajo permite fortalecer, principalmente, la labor de docencia, pero además aporta a otras funciones de la Universidad como la investigación y la proyección social. También coordina la elaboración de estadísticas institucionales y realiza estudios sobre aspectos relacionados con educación superior.
Alberto Jaramillo Jaramillo, director de esta dependencia, que se creó en 1977 -en sesión ordinaria del Consejo Directivo-, afirma que su nacimiento se originó con el fin de ser un organismo asesor de la Rectoría y de la comunidad universitaria en general.
“Su labor es la de producir y mantener un plan integral de desarrollo, y de asesorar de forma permanente a cada uno de los subsistemas de la vida universitaria en la búsqueda de sus objetivos”, explica.
Para lograr esos propósitos, esta dirección, que tuvo como primer director a Gonzalo Arboleda Palacio, está integrada por Alberto, cuatro asistentes: Andrea Escovar Grisales, Isabel Cristina Montes Gutiérrez, Mario Alexander Orozco Arcila y Mónica Lucía Vargas Echeverry; y Stefania Rodríguez Campo, analista temporal, quienes cuentan con el apoyo secretarial de María Clara Guevara Ospina.
“Una de las principales fortalezas de este equipo de trabajo es la diversidad de disciplinas y enfoques de sus integrantes, lo que posibilita el enriquecimiento de las actividades de la dirección, desde diferentes perspectivas”, asegura Isabel.
Se aprende mucho
Asegurar la calidad de los programas académicos de la Universidad, mediante el acompañamiento a los procesos de registro calificado y de acreditación voluntaria que adelantan los coordinadores de pregrados y posgrados; y realizar estudios sobre temas de interés institucional son dos de las necesidades que atiende esta dirección.
Así mismo, trabajan en orientar el proceso de planeación estratégica y operativa de EAFIT, coordinar los procesos de autoevaluación institucional y ofrecer servicios de asesoría a otras instituciones de educación superior en procesos de autoevaluación.
Pero, si bien esta dirección ha sido significativa para el recorrido y proyección a futuro de la Universidad, sus integrantes también se han enriquecido a través de su labor.
“Estar aquí es la posibilidad de aportarle, en alguna medida, al mejoramiento de la educación superior del país, pero también significa desarrollar nuestras capacidades, a la vez que se adquiere mayor experiencia y conocimientos”, anota Andrea.
La misma percepción la tienen sus compañeros. Por ejemplo, Isabel piensa que hacer parte de esta unidad institucional le permite confirmar su gusto por los temas educativos, en lo que se refiere a políticas, un área en la que aspira continuar sus estudios.
De igual manera, destaca el aprendizaje que a diario obtiene, bien sea sobre de metodologías de investigación, elaboración de instrumentos de recolección de información, entre otros.
Así, mientras se da el aprendizaje y el crecimiento personal y profesional de los integrantes de este equipo, también se contribuye con uno de los propósitos que se trazó la Universidad: asegurar la excelencia académica.