• Ana Catalina Correa Agudelo pasó de estudiante a empleada. Ahora tiene bajo su responsabilidad la rentabilidad y la sostenibilidad de las unidades de negocio institucionales como Vivo, la Librería EAFIT, la frutera Sol y Melón, entre otros.
• El compromiso y la experiencia son algunas de las cualidades con las que esta egresada eafitense espera realizar su gestión a la que quiere integrarle iniciativas novedosas, acordes a las necesidades de los diferentes públicos de la Institución.
El Centro de Acondicionamiento Físico Vivo, la Librería EAFIT, la frutera Sol y Melón, la Tienda Universitaria, los dispensadores de alimentos y las concesiones de algunos establecimientos dentro de la Institución hacen parte de la cotidianidad eafitense.
Ya sea para ejercitarse al mediodía, comprar un libro, disfrutar de un refrigerio o adquirir un suvenir institucional, estas unidades facilitan la vida dentro del campus.
Y, desde hace algunos meses, tienen una encargada de potenciar y fortalecer los servicios que ofrecen. Se trata de Ana Catalina Correa Agudelo, una administradora de negocios de EAFIT, que llegó a la Dirección Administrativa y Financiera (Diaf) para asumir la jefatura de estos negocios institucionales.
Con una especialización en Mercadeo Gerencial de la Universidad de Medellín, y experiencia en el sector comercial y hotelero de la ciudad, la nueva administrativa tiene como principal función coordinar estos unidades y reinvertir sus ingresos en satisfacciones para la comunidad universitaria.
“Uno de los retos más grandes es realizar un buen mercadeo que nos permita aumentar los ingresos, pero sin perder de vista el cuidado y la sostenibilidad de los recursos”, afirma y dice sentirse muy contenta de regresar a la Universidad, esta vez como empleada.
Ana Catalina llegó gracias a una convocatoria del Centro de Egresados y, después de participar en el proceso de selección, resultó ser la persona idónea para el cargo.
“Siempre he considerado a EAFIT como una de las mejores universidades de la ciudad y del país. Además conservo muy buenos recuerdos de mi época de estudiante. Por esa razón, es muy gratificante volver a la Institución y contribuir a su crecimiento con mis nuevas responsabilidades”, comenta.
La jefa expresa que siempre le ha gustado trabajar en empresas reconocidas y con buena proyección y, en este caso, asumió el reto por tratarse no solo de su alma máter, sino de una universidad líder.
Ana Catalina está decidida a velar por la autosostenibilidad de los negocios que tiene a su cargo, integrar novedosas iniciativas de acuerdo con crecimiento de la Universidad y velar porque se brinden servicios acordes a las necesidades de los diferentes públicos.
Llegó con experiencia y compromiso
El recorrido laboral de Ana Catalina comenzó desde muy temprano, cuando realizó su práctica profesional en la empresa Posicionar. En aquel entonces no existía el Bureau de Convenciones y Ana Catalina participó en el apoyo, la coordinación y la promoción de hoteles como el Belfort, Dann Carlton, Four Points Sheraton, Intercontinental, Par 10 y Poblado Plaza.
“Fue una experiencia muy enriquecedora para mi profesión. Aprendí de diferentes aspectos como las relaciones públicas, el manejo de medios, el mercadeo, entre otras”, recuerda.
Miro Seguridad y el Club Country Ejecutivos son otras de las entidades que tuvieron a Ana Catalina al frente de sus áreas comerciales, de mercadeo, servicio al cliente y otros departamentos estratégicos similares.
Con esta trayectoria, sumada a su formación académica, a sus conocimientos en el campo laboral y a su voluntad de trabajar por la Universidad, asumió esta jefatura, convencida de que estas cualidades serán clave a la hora de impulsar estos negocios de la Institución.
Su tiempo se encuentra repartido en otras actividades como responder correos, asistir a reuniones y conocer a fondo sus funciones.
En sus ratos libres le gusta disfrutar de los diferentes espacios que le ofrece EAFIT, especialmente, las actividades culturales.
Apasionada por el cine, la decoración y la organización de bodas, Ana Catalina se siente feliz de hacer parte de una institución en la que, según sus palabras, todos los compañeros tienen un alto sentido de compromiso.
“Admiro esa responsabilidad y la capacidad de trabajar arduamente. No podría sentirme mejor en este ambiente laboral”, dice.