• Un total de 50 rectores de colegios de Medellín participaron, el 3 de febrero, en la presentación del programa de Becas con Aportes de Empleados, que es posible gracias al compromiso de cerca de 380 contribuyentes y que en este 2012 cumple 10 años.
• En el encuentro se hicieron algunas reflexiones sobre la educación y se instó a los directivos a inscribir a sus estudiantes en el curso nivelatorio, primera etapa de esta iniciativa. La invitación es para que más empleados se vinculen a la propuesta.
Serán 30 jóvenes bachilleres los que iniciarán dentro de poco, como es tradición desde hace una década, el curso nivelatorio del programa de Becas con Aportes de Empleados, espacio que no solo les permite asistir a la Universidad cada sábado para obtener nuevo conocimiento y repasar lo aprendido, sino optar, al final del año, por la beca para realizar un pregrado en EAFIT.
Los rectores de los distintos planteles de Medellín son quienes envían sus mejores estudiantes a este curso, gracias a la invitación que les hace la Universidad, como sucedió el viernes 3 de febrero, donde cerca de 50 directivos acudieron al auditorio 103 del bloque 38 para escuchar experiencias acerca de la iniciativa.
Este programa, liderado por el Departamento de Beneficios y Compensación, adscrito a la Dirección de Desarrollo Humano-Bienestar Universitario, les posibilita a 10 de los 30 jóvenes del nivelatorio cumplir, cada año, su sueño de ingresar a la educación superior, gracias al compromiso de cerca de 380 empleados que en la actualidad destinan de su salario un aporte voluntario.
La invitación es a que cada vez sean más los empleados eafitenses que se unan a esta propuesta que, al crecer en número de aportes, crecerá también en número de beneficiarios.
La forma de participar es enviando un correo electrónico a Paola Gaviria Meléndez, jefa de Beneficios y Compensación, a pgaviri3@eafit.edu.co, autorizando el valor a debitar de la nómina y la quincena en la que es más fácil hacer la contribución.
No importa el valor, lo importante es ser promotores de esas sonrisas que se evidencian en los rostros de estos jóvenes cuando sienten que su futuro profesional ya no solo es una ilusión, sino una realidad.