El bloque 20 recibió la certificación Leed por sus aportes al medio ambiente y la sostenibilidad​​

Desde su entrega, en septiembre de 2023, el hall del primer piso del bloque 20 se ha convertido en uno de los lugares favoritos de los eafitenses.

• La estructura obtuvo la certificación Leed New Construction nivel gold, que reconoce de manera integral su compromiso con el medio ambiente, desde el diseño hasta su materialización.

• Del edificio se destacan aspectos como el monitoreo y control de consumos, el apoyo en paneles fotovoltaicos, el aprovechamiento de corrientes de aire para evitar uso de aires acondicionados, y la iluminación natural.

Aunque no es el lugar en el que normalmente recibe sus clases, Juliana Zuluaga, estudiante de Administración de Negocios, pasa la mayoría de sus tardes allí porque es cómodo para estudiar y concentrarse; al profesor Juan Carlos López Díez le gusta dar sus clases ahí, al aire libre, porque es un lugar fresco en el que, sin importar el calor exterior, siempre hay una corriente de aire refrescándolo a él y a sus estudiantes; y, por su parte, Ana Cristina Correa Yepes, coordinadora de proyectos de la Universidad de los Niños, lo prefiere porque es un lugar amplio y dotado con una iluminación natural.

12.500 metros cuadrados distribuidos en 10 pisos, 42 laboratorios, ocho talleres, tres aulas de aprendizaje activo y 950 puestos de trabajo configuran el lugar al que se refieren los tres eafitenses: el bloque 20, un espacio que, a pesar del poco tiempo que lleva operando -su entrega oficial fue en septiembre de 2023- ya ha sido apropiado por todos los eafitenses.  Especialmente el hall de su primer piso, donde es habitual encontrar estudiantes, profesores y colaboradores a todas horas del día.

Y esas condiciones que destacan Juliana, Juan Carlos y Ana Cristina, entre otras cualidades, son posibles gracias a una edificación que, desde su diseño, fue pensada para garantizar el confort térmico en todos sus espacios, generar bienestar a partir del uso de iluminación natural y propiciar el ahorro en el consumo de agua y energía. Y ese compromiso permitió que, en el mes de marzo de 2024, la estructura recibiera la Certificación Leed New Construcción v 2009, avalando sus aportes al medio ambiente y  a la sostenibilidad del planeta. Esta es la primera vez que una estructura del campus recibe este aval.

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Este sello de calidad reconoce, de manera especial, los proyectos infraestructura que están comprometidos con los temas medioambientales de manera integral, es decir, desde que se gesta el diseño hasta que se materializa. Nosotros obtuvimos 73 puntos de los 100 que se otorgan, lo que nos ubica en el nivel Gold”, explica Sabrina Molina Gallego, jefa de Gestión del Campus.

Los puntajes más altos obtenidos por la Institución fueron en los temas de energía, agua y ahorro. Esto, continúa explicando Sabrina, envía un mensaje potente a la sociedad: que es posible integrar las buenas prácticas de sostenibilidad al sector de la construcción, que es uno de los que mayores impactos genera en el medio ambiente.

Y a estas palabras se suma Ricardo Taborda Ríos, decano de la Escuela de Ciencias Aplicadas e Ingeniería. “Para nadie es un secreto que este es un sector que genera muchos desperdicios y emisiones de Co2. Entonces, contar con una construcción que tiene este sello evidencia que sí es posible cambiar esa realidad y que, desde el diseño y la construcción, se pueden tener en cuenta factores importantes para que las construcciones sean más sostenibles y responsables con el planeta”, dice.