Perfil
La visibilidad, la investigación y el doctorado, algunos de los retos del nuevo decano
Camilo Piedrahita se vinculó a la Institución en 2007 como profesor de tiempo completo y, hasta 2015, se desempeñó como jefe del Departamento de Derecho y del pregrado.
• Camilo Piedrahita, nuevo decano de la Escuela de Derecho, ya tiene claros cuáles son sus desafíos al frente de esta unidad. El séptimo doctorado de EAFIT, la revisión curricular y la evaluación del papel de la educación jurídica en el posconflicto están entre las prioridades del directivo.
• El docente reemplaza en el cargo a Hugo Alberto Castaño, quien continuará como secretario general y líder de la nueva Oficina Jurídica. A este eafitense la Universidad le agradece sus significativos aportes durante los 12 años que estuvo al frente de la Escuela de Derecho.
La visibilidad y el diagnóstico curricular profundo; el fortalecimiento de la investigación y la cualificación constante de los docentes; la calidad, la excelencia académica y la conexión permanente con el entorno; y, por supuesto, la consolidación de un séptimo doctorado para EAFIT…
Los retos son muchos y la voluntad también. Con esa actitud asumió Camilo Piedrahita Vargas su nuevo reto como decano de la Escuela de Derecho, responsabilidad que tomó desde el primero de febrero y que se oficializó el miércoles 10, en el acto de posesión.
El docente releva en este cargo a Hugo Alberto Castaño, quien continuará como secretario general y líder de la nueva Oficina Jurídica. Sus aportes, durante los 12 años que estuvo al frente de la decanatura, son invaluables, pues alcanzó logros como la acreditación de alta calidad del pregrado, la consolidación de la oferta de posgrados, la acogida de los egresados en el medio, y la cualificación y el apoyo permanente al cuerpo docente.
Conocimiento de la escuela
La vinculación de Camilo con la Universidad, desde 2007, le ha permitido conocer en profundidad la dependencia que ahora lidera, los procesos que ha vivido, las fortalezas que tiene y los desafíos que debe enfrentar en el futuro.
El decano no desconoce, por ejemplo, que uno de sus objetivos será el análisis de la educación jurídica en un eventual escenario del posconflicto colombiano, pues el académico está convencido de que los programas de derecho deben estar conectados permanentemente con su entorno y sus realidades.
Igualmente, fue uno de los docentes que participó en el proceso de autoevaluación que vivió la Escuela en 2015 (con miras a la renovación de la Acreditación). Y aunque el informe de los pares fue positivo y se encuentran a la espera de la resolución ministerial, para el directivo este proceso es una oportunidad de mejora y crecimiento continuo. “Así que el primer paso será revisarnos e implementar las acciones de mejoramiento derivadas de este informe”, apunta.
El doctorado en Derecho es otra de las prioridades del nuevo decano. Para Camilo se hace imperativa la necesidad de cerrar el ciclo de programas de la Escuela con este posgrado. Para lo anterior, el trabajo con su equipo humano estará concentrado en las labores de investigación y producción académica.
“Nosotros contamos con un buen nivel de investigaciones, proyectos, ponencias y publicaciones, pero tenemos que ser más contundentes, cualificar aún más la producción y articularla con todos las actividades de la escuela”, señala.
Las revistas con las que cuenta actualmente esta unidad académica, en los campos de Derecho Internacional y Penal, también serán sometidas a un proceso de revisión con miras a fortalecerlas y hacer más visible el trabajo investigativo de estudiantes de pregrado y posgrado, y de los profesores.
“La escuela tiene un excelente prestigio y reconocimiento, y nosotros queremos seguir haciendo eso para garantizar que nuestros estudiantes sigan desempeñándose en los mejores cargos y estamentos en el ámbito regional y nacional”, manifiesta.
Feliz con el compromiso de su equipo
Camilo es abogado y candidato a doctor en Derecho Procesal de la Universidad de Medellín, y cuenta con una maestría en Derecho Económico de la Universidad Externado de Colombia.
Aunque en EAFIT es conocido por su labor docente, de su trayectoria laboral también se destaca su experiencia como asesor y abogado litigante en temas de derecho económico y laboral, y como integrante del Instituto Latinoamericano del Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social (Iltrass).
En la Universidad también se ha desempeñado como coordinador del área de Derecho del Trabajo y la Seguridad Social y, desde 2008, como jefe del pregrado y el Departamento de Derecho, responsabilidad que lideró hasta este nombramiento, que recibe con orgullo y satisfacción.
“Me siento feliz de estar en esta escuela que cuenta con un grupo humano excelente, con estudiantes de muy buen nivel y profesores cualificados, pues en la actualidad el 70 por ciento de ellos cuenta con maestría y esperamos que en dos años un cincuenta por ciento de los docentes tengan nivel de doctorado”, expresa.
El directivo afirma que si bien la enseñanza del derecho no precisa de grandes laboratorios o máquinas, sí se encuentra basada en su mayoría en la relación entre estudiantes y profesores, por lo que no deja de agradecer el compromiso del equipo de profesionales que ahora lidera.
Eso, la conexión entre el campo jurídico y la economía, que en EAFIT aporta una visión más completa e interdisciplinaria y la variedad en las líneas de énfasis son algunos elementos diferenciadores que espera seguir manteniendo durante su gestión.