• En el Centro de Artes y en la Sala de U-Arte Contemporáneo de la Universidad Nacional se exhibe Madame B, exploraciones en el capitalismo emocional. Ambas exhibiciones estarán abiertas hasta el 30 de junio.
• Esta video instalación está compuesta de 25 pantallas en las que, además, se pueden apreciar fotografías y objetos alusivos a los personajes de este clásico de la literatura.
Por estos días el Centro de Artes le pertene a Madame Bovary. La protagonista de la obra clásica de Gustave Flaubert acaparó todas las miradas en el Centro de Artes de la Institución y en la Sala de U-Arte Contemporáneo de la Universidad Nacional.
El motivo fue la doble inauguración de Madame B, exploraciones en el capitalismo emocional, la video instalación de las artistas Mieke Bal (Holanda) y Michelle Williams Gamaker (Inglaterra) que llegó a Medellín gracias a la gestión de la curadora Lucrecia Piedrahíta.
Se trató de una experiencia de inmersión a la que asistieron jóvenes, adultos, expertos en arte y algunos curiosos que se toparon con la reinterpretación contemporánea de la obra maestra del francés, escrita en 1856.
Con detenimiento el público leía los textos incrustados en las paredes; y observaba los videos, fotografías y objetos alusivos a Madame Bovary. Algunos no conocían la historia, pero se dejaron llevar por sus percepciones.
“A veces me gusta llegar a la exposición sin saber mucho, porque así dejo que el arte hable por sí solo: sentir la fotografía por la fotografía, la luz por la luz, la imagen por la imagen. Después intento entender lo que hay detrás”, afirmó María Adelaida Gómez, artista plástica y asistente a la exhibición.
El público recorría la sala sin tener un orden determinado o un tiempo específico en cada estación, pues, a diferencia de la película (basada en la obra literaria), el público podía escoger el camino, el tiempo que pasaba en cada instalación y hasta podía reinventar la historia con base en lo que veía, oía y experimentaba.
Eso era, precisamente, lo que buscaban las artistas Mieke Bal y Michelle Williams Gamaker al crear este proyecto colaborativo que tardó dos años en plasmarse. El propósito era lograr un experimento audiovisual que propiciara una cercanía visual y sensorial que sumergiera al público en el universo de Emma, la protagonista de Madame Bovary.
La instalación
Para Esteban Arenas, quien asistió a la apertura en EAFIT, lo más llamativo del montaje fue la fragmentación. “Me parece interesante la idea de coger una película y descomponerla desde el vestuario, los personajes y la fotografía, porque así uno elige cómo conocer toda la obra”.
Y es que en Madame B, exploraciones en el capitalismo emocional, las artistas trajeron a la actualidad un clásico de la literatura por medio de 25 pantallas de gran formato, que proyectaban, en simultáneo, distintas partes de la película.
Además de las proyecciones se pueden encontrar archivos de prensa que evidencian el impacto que tuvo la película en su lugar de rodaje y exhibición. También hay retratos y prendas de vestir de los personajes.
Incluso, los visitantes pueden enterarse de detalles de la realización de la película como, por ejemplo, que uno de los sombreros utilizados en el rodaje fue conseguido por la actriz que interpretaba a la protagonista, en una tienda de segunda, minutos antes de comenzar la grabación de una escena.
“Con espacios como este la Universidad se arriesga a presentar propuestas distintas e interesantes, que llaman la atención e invitan a asistir”, anotó Ana Eugenia Fernández, otra de las asistentes a la exposición.
Las exhibiciones estarán abiertas hasta el 30 de junio y se sugiere asistir a las dos locaciones, pues en cada una se muestran escenas diferentes. De esta manera, se logrará un recorrido completo de la obra que relata la relación entre el capitalismo y el romance, y en la que se cuestiona, visualmente, el rol de la mujer en una sociedad conducida por impulsos masculinos.