• Estudiantes de sexto a octavo grado de 18 instituciones educativas de Itagüí (Antioquia) participan, en estas vacaciones, del Semillero Universidad de los Niños.
• En esta primera etapa, que va del 9 al 20 de junio, se abordan temas como arte, ciencia e ingeniería. La segunda fase iniciará en julio e irá hasta noviembre.
La obra Los ciegos, de la artista Sophie Calle, en la que personas invidentes de nacimiento definen su imagen de belleza, avivó el interés por el arte de Milena Osorio Taborda, de la Institución Educativa San José.
A Lorena Gómez Gómez, estudiante de la misma institución, es la ciencia la que le gusta porque le inquieta buscar respuestas a diferentes interrogantes. Mientras tanto, Mateo Guiral Ledezma, de la Institución Educativa Enrique Vélez Escobar, siente que el tema con el que más se identifica es la ingeniería porque tiene diferente aplicaciones en las que se pone a prueba el ingenio para construir casas, carros, centros comerciales y robots.
Ellos hacen parte de los cerca de 120 niños de 18 instituciones educativas del municipio de Itagüí (Antioquia) que, durante este receso de vacaciones, vienen a EAFIT para experimentar, preguntarse, descubrir y asombrarse en el Semillero Universidad de los Niños.
La primera etapa del semillero, que inició el 9 de junio y terminará el día 20 del mismo mes, es un espacio para acercar a los participantes a la construcción de conocimiento desde la ciencia, el arte y la ingeniería, y para estimularlos en la creación de proyectos que puedan resolver problemas de su entorno.
Para Selene Pineda Gómez, coordinadora del proyecto, estas semanas de trabajo con los estudiantes han sido muy valiosas y productivas porque se logró conectar a los participantes con los temas y generar en ellos preguntas que luego serán el motor para continuar con las actividades del próximo semestre.
Esta iniciativa es posible gracias al Plan Teso, una alianza entre EAFIT y este municipio del sur del Valle de Aburrá que tiene como objetivo desarrollar capacidades en estudiantes y maestros al integrar las tecnologías de la información.
Funciona en dos etapas en las que se utilizan las herramientas metodológicas de la Universidad de los Niños, es decir, la pregunta, el estímulo y la experimentación. Así, en su primera fase, el Semillero acerca a los participantes a la ciencia, el arte y la ingeniería para despertar en ellos la curiosidad e invitarlos a hacerse preguntas.
Los intereses, ideas e inquietudes de los participantes, que se recogen en los talleres, serán el insumo para desarrollar proyectos artísticos, científicos y de ingenio durante el segundo módulo, que se realizará entre julio y noviembre.