• Desde 2012 la Universidad cuenta con este grupo de trabajo que ya tiene un procedimiento establecido para recibir y atender los diferentes casos relacionados con el ambiente laboral.
• Confidencialidad, diálogo, reflexión y acuerdos de mutuo respeto son algunas de las premisas con las que este comité espera acompañar a los colaboradores eafitenses.
Su misión es escuchar, generar acercamientos y proponer soluciones. Su objetivo no es tomar decisiones ni emitir juicios. Ellos no toman decisiones, ni emiten juicios.
Se trata del Comité de Convivencia Laboral ConvivEAFIT que, desde octubre de 2012, inició sus labores como un mecanismo en el que los empleados de la Universidad pueden exponer sus comentarios, reclamos y solicitudes relacionadas con el ambiente laboral.
Su existencia es consecuente con la Resolución 652 de 2012 del Ministerio de Trabajo, que exige a todas las entidades públicas y privadas tener dentro de sus organizaciones una instancia que vele por la sana convivencia y el buen clima de laboral.
Para esto, este equipo de trabajo, conformado por ocho personas (que fueron elegidas por la Institución y por los empleados), ya tiene listos los mecanismos a través de los que los colaboradores eafitenses podrán acceder a sus servicios.
“Nosotros cumplimos una función de conciliación para buscar acercamiento entre las partes. Al enterarnos de algún caso, la idea es tratar de mirar desde afuera las diferentes versiones y no tomar partido”, expresa Juan Carlos López Díez, profesor de la Escuela de Administración y uno de los integrantes de ConvivEAFIT.
Es importante, según indica Sonia López Franco, docente de la Escuela de Ciencias y Humanidades e integrante del comité, que antes de llegar a esta instancia se identifique si la situación por la que se atraviesa es considerada como acoso laboral y, una vez hecho esto, se modifiquen algunos comportamientos y se trate de encontrar soluciones entre las partes.
Sin embargo, en caso de que este primer acercamiento no sea efectivo, el Comité de Convivencia Laboral está preparado para escuchar a los eafitenses y llegar a un acuerdo.
Algunos mecanismos
En estos momentos existe un procedimiento para acudir a este organismo institucional, con el fin de exponer ante este los comentarios y casos de su competencia.
“Todo esto bajo un acuerdo de confidencialidad juramentado, y redactado por los abogados del Departamento de Contratos y Convenios, que nos obliga a proteger la identidad del eafitense que envía su queja”, complementa Sonia.
Allí debe exponer la situación y anexar las pruebas de la misma (audio, texto o video, entre otras), o los datos de los testigos. La información consignada será leída solo por los integrantes del Comité de Convivencia Laboral.
“A partir de ese momento tenemos 15 días para evaluar el caso, y reunir los datos y los testimonios necesarios. Luego se citará a los implicados y se les invitará al diálogo para que puedan solucionar la situación”, explica la docente.
Sonia recalca que la intervención del comité se fundamenta en el diálogo, la reflexión y los acuerdos de mutuo respeto, para evitar llevar el caso hasta otras instancias.
Si ambas partes concilian, se hace un respectivo seguimiento para verificar que los compromisos se cumplan. Si hay reincidencia, o lo pactado no se efectúa, lo siguiente será enviar el caso ante organismos superiores.
“Pero la idea es evitar llegar a estos términos y que todo se pueda resolver desde el comité, porque para eso estamos”, puntualiza Sonia.
Otra herramienta que está en proceso de creación es un sitio web en el que los empleados podrán encontrar información acerca del acoso laboral, con el fin de que aprendan a identificar las situaciones y los medios para resolverlas.
El Comité de Convivencia Laboral también contará con un manual que será distribuido entre la comunidad de docentes y administrativos.
Sonia añade que, durante todo el proceso, el empleado que expresó su inconformidad queda amparado por la ley y no se podrán tomar decisiones laborales sobre su caso por un año.