Ser siempre aprendices y mantener a la U en transformación: el reto de nuestros nuevos profes eafitenses
Revive algunos de los momentos de la jornada en esta nota.
• La Universidad le dio la bienvenida, este semestre, a 94 nuevos profesores de las cinco escuelas. Y el acto para recibirlos se realizó este 3 de febrero, en el hall del bloque 20, con un espacio en el que reflexionaron sobre su rol, y las causas personales que los conectan con el aprendizaje y la transformación de la sociedad.
• Durante el encuentro, tal como lo hicieron los estudiantes en su inducción, los profesores hablaron de esos propósitos que los movilizan, como cerrar brechas de género, fomentar la curiosidad y el pensamiento crítico, la ética y la integridad, o trabajar por el campo, entre otros.
A comienzos de este año, durante las jornadas de inducción para los estudiantes nuevos de pregrado, la Universidad los recibió con una pregunta por parte de sus directivos y futuros profesores: ¿cuál es la causa con la que más te identificas? Algunos mostraron una vocación animalista; otros manifestaron su intención de disminuir el hambre en los niños o de garantizar el recurso del agua en el futuro; y también hubo un grupo que se sintió retado a trabajar por un mayor acceso a la educación para los jóvenes, por la creación de empresa o por la generación de empleo, entre otros propósitos.
Pero ¿qué pasa cuando tomamos esa misma pregunta y se la devolvemos a quienes estarán guiándolos en su proceso de formación? Eso lo pudimos averiguar este lunes 3 de febrero, en el hall del bloque 20, durante el acto de bienvenida para los 94 nuevos profesores de cátedra que, a partir de este semestre, comenzarán a hacer parte de las dinámicas de aprendizaje vivo y experiencial de las cinco escuelas de la U.
Nerea Gandara Guerra y María Auxiliadora González Malabet, ambas de la Escuela de Finanzas, Economía y Gobierno comparten una causa: ayudar a cerrar la brecha de género en estas disciplinas a partir de la educación; Esleider Jaramillo Giraldo, de Artes y Humanidades, quiere acercar la tecnología de una manera diferente y accesible a las personas; y a Laura Arredondo Vélez, de la Escuela de Administración, la movilizan los escenarios inesperados, esos que la sacan de su zona de confort y la retan a probar cosas nuevas.
Y como ellos hubo más historias que evidenciaron esa vocación conectada con propósitos y causas como el fomento de la curiosidad y el pensamiento crítico, la cocreación, la transformación de la sociedad, el arte, la música o la cultura, la verdad, la transparencia, o hacer fácil las matemáticas, entre otras.
“Soy funcionaria pública, pero profesora de corazón y por convicción. Mi causa es movilizar mentes, corazones y situaciones en pro del desarrollo rural”.
Cristina Morales Idarraga, profesora de la Escuela de Artes y Humanidades.
Los cerca de 45 profesores que asistieron al encuentro respondieron a esta pregunta como parte de un ejercicio en el que se les entregó un lienzo en blanco en el que, además de su propósito o causa personal, debían consignar sus pensamientos sobre los “chispazos” educativos que los sorprendieron alguna vez en sus vidas, sus compromisos con ser aprendices durante toda la vida; y las estrategias que implementarían para conocer y conectarse con otros colegas de áreas diferentes a las suyas.
“Esta es nuestra manera de invitarlos a ser un lienzo en blanco de manera permanente, que se permitan el vacío y la oportunidad de irse llenando con experiencias y aprendizajes todos los días”, les dijo la rectora Claudia Restrepo Montoya durante su saludo, en el que estuvo acompañada, además, por los vicerrectores de Aprendizaje, y Ciencia, Tecnología e Innovación, y por los decanos de las escuelas.
Así mismo, la directiva también les compartió que la razón por la que este acto se realizó en un espacio abierto como el hall del bloque 20, se debía a que es un lugar que refleja el espíritu del Proyecto Educativo Institucional, donde el estudiante está en el centro y las dinámicas pedagógicas están transformándose todo el tiempo.
“Llegan a una Universidad que los va a retar. No podemos enseñar como aprendimos y, hoy más que nunca, estamos llamados a ser disruptivos en el aprendizaje. También quiero recordarles que el rol que ustedes desempeñan desde este semestre está en el corazón de nuestra Universidad y queremos que tengan siempre la humildad del aprendiz. Bienvenidos a esta comunidad de saberes”, puntualizó la directiva.
Esta fue una reflexión que le llegó, de manera especial, a Juan Martín Hoyos Manzur, de la Escuela de Ciencias Aplicadas e Ingeniería, quien después de una pausa de varios años, mientras cursaba su maestría en Automoción en Barcelona (España), regresó al país para retomar una de sus pasiones: la docencia.
“Hace algunos años tuve la oportunidad de dar un par de módulos en una materia de Proyecto III, pero en esa época estaba creando una empresa y me absorbía todo el tiempo. Ahora, con más experiencia, quise regresar a este rol que me llena profundamente y que me mantiene conectado con el conocimiento y con las ideas de los estudiantes. Por eso comparto la reflexión de la Rectora de ser aprendices permanentes”, manifestó.
Un caso similar al de Juan Guillermo Villegas Ramírez, de la misma unidad, y quien regresa a la docencia después de 20 años. “Hoy, después de escuchar a mis colegas, me doy cuenta de que estoy en el lugar correcto, y de que mi causa, la de hacer que las matemáticas ayuden a las personas a tomar mejores decisiones, se conecta con los propósitos de esta Institución”, expresó.
Durante la jornada los profesores vivieron una actividad de aprendizaje activo junto al Centro EXA para la Excelencia en el Aprendizaje y disfrutaron de un espacio de conversación entre ellos. Al final los asistentes recibieron la columna física
Lo bello de ser prímiparo, escrita por la rectora Claudia Restrepo para el periódico El País, y una invitación a sumar esfuerzos para cambiar la realidad actual en la que 6 de cada 10 jóvenes en Colombia no pueden acceder a la educación.
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